Mascarillas naturales para eliminar arrugas

Las mascarillas son nuestras aliadas superpoderosas en contra de las arrugas de la cara, si las usamos una vez por semana podemos mantener un cutis fresco y vibrante.

Con las mascarillas podés exfoliar el rostro, limpiarlo y tonificar la piel, pero debés tener en cuenta tu tipo de piel para usar la mascarilla correcta. También hay que tener muy en cuenta los ingredientes presentes en la mascarilla, pues podrías tener alguna alergia o causar algún desbalance. Si querés saber si sos alérgica a algo, o tu piel reacciona mal a alguna mascarilla, debés visitar al dermatólogo de inmediato.

Aquí te recomendamos excelentes mascarillas naturales para prevenir las arrugas según tu tipo de piel.

Piel seca – Mascarillas oleosas

La piel seca necesita de una humectación profunda de forma regular, sino se seca y se llena de arruguitas. Este tipo de piel produce pocas grasas naturales, pero existen ingredientes que pueden ayudarte.

Cuando comprés o preparés una mascarilla para solucionar la resequedad de tu piel, buscá una que tenga ingredientes grasosos, por ejemplo el aceite de oliva o el aguacate.

Nunca debés usar máscarillas con sal, pues pueden resecar tu piel aún más.

Piel grasosa – Mascarillas astringentes

La piel grasosa recibe este nombre por producir un exceso de grasa, especialmente en la frente y la nariz. Para recuperar el balance, podés usar mascarillas astringentes que limpien y tonifiquen la piel.

La manzana y el té verde son ejemplos de ingredientes que podés usar en mascarillas caseras o compradas. Nunca usés una mascarilla grasosa y evitá las cremas humectantes que tengan una base oleosa.

Tu piel necesita mantenerse limpia y una buena mascarilla puede ayudarte a cerrar los poros y conseguir un aspecto más suave.

Piel normal – Mascarillas nutritivas

La piel normal tiene un buen balance de grasas, así que lo que necesita es exfoliarse y nutrirse profundamente. Con este tipo de piel podés aprovechar y probar distintos tipos de mascarillas, te recomendamos la zanahoria y la miel por tener excelentes cualidades nutritivas que podés aprovechar.

También podés exfoliarte con frecuencia usando mascarillas con sal, pero nunca más de una vez por semana.

Recuerda que la piel necesita un balance, así que no te excedas con un tipo específico de mascarillas.

Hacé tus mascarillas y relajate, dejá que actúe en la piel y borrá esas arrugas que no te gustan. Recordá que si tenés piel mixta podés usar dos mascarillas distintas sin ningún problema y no dejes de consultar a tu dermatólogo por cualquier cambio en tu piel.